Julia N. Me envió un enlace a esto, que forma parte de una subasta que se celebra a fines de octubre. Una subasta que incluye, entre otras cosas, la colección de Jim Smiley.
Supongo que creí que Sr. Smiley siempre estaría allí, así como algún día, cuando tuve un poco de dinero enojado, o logré esa cintura de veintiséis pulgadas, o que llegara a un momento nunca de la perfección inalcanzable, me aventuraría de nuevo a Su tienda, así como seleccionar un vestido perfecto y encantador. No es que solo él tuviera uno, te importa, él tenía mucho. Sin embargo, quiero decir que me demoré en hacer mi opción tanto, así como ahora es tan pronto, ya que se está retirando, cerrando su tienda, así como subastando su colección. (Sí, entiendo que podría hacer el teléfono o en la oferta de Internet, sin embargo, no es exactamente lo mismo que estar en su tienda).
Nunca llegué a su tienda de Nueva York, aunque me pareció que siempre estaba caminando más allá de sus ventanas a altas horas de la noche, de pie en la calle haciendo resoluciones de papel de tejido para ir a mi próximo viaje. Me encargué de ir a la tienda que tuvo en Nueva Orleans, de vuelta en 1999. Fui solo una (embargada, necesidad a saber solo) once semanas esperando en ese momento; Fue caliente y húmedo, así como a agosto, así como a agosto, y me quedé sin motivos (aparte de “perchería generalizada”) de por qué estaba durmiendo tanto, así como por qué necesitaba bebidas frías cada siete minutos, en promedio. . Pensar en mi arrebatamiento fue en Defcon Tres, potencialmente dos, mis compañeros de viaje pensaron en un viaje rápido a una tienda vintage, un apaciguamiento pequeño y fácilmente hecho.
Dado que podría haber pasado una serie de horas allí, de pie con los ojos cerrados, simplemente respirando profundamente en ese entorno de vestido del cielo, los cuarenta y cinco minutos, o así que manejé para conseguirlo estaba en el lado “rápido”. No conseguí un Dior, o un Ceil Chapman, o un Claire McCardell, ni algo así, obtuve dos batas de embarazo de la década de 1950, desde el hogar decididamente desagradable de Sears, en la pañuelo rojo, así como a la telaida roja. Sin embargo, me gustó, así como los usé constantemente, así como los que eran algunas de las únicas ropas de embarazo que podría ver sin repulsión después de que terminaran mis cuarenta y dos semanas de pregancel.
Quién entiende, tal vez algún día, los planetas podrían haberse alineado, así como si hubiera ido, así como si hubiera recibido algo extremadamente así, o tal vez tendría la misma parálisis que he tenido en cada viaje a (Smiley’s Polar opuesto) Topshop, Donde siempre termino de vagar sin rumbo, tratando de descubrir lo mejor, así como a salir con las manos vacías, o (peor) con una diadema de plástico blanca, o un cinturón de patente amarillo, o algo así como totémico, así como inquietables. Ahora nunca lo sabremos. Sin embargo, la próxima vez que creo “Algún día …” Me detendré, así como a mí mismo, “¿Por qué no hoy?”
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